A la Mesa

La mayoría de las personas, cuando escuchamos el llamado de “a la mesa” suponemos que es para comer. Hoy no hablaremos de comida, comelitones o tentenpies; hablaremos de las negociaciones que se hacen en nuestro México, todo tipo de negociación que involucre una ley y dos bandos en pugna. Si uno que la “interpreta” como le conviene y el otro que también la “interpreta” como le conviene, pero ambas interpretaciones están en sentidos dispares, por lo que debe existir un tercero que concilie o medie entre ambos. Así entonces, en el México real y actual, se negocia con muchos conceptos tan ambiguos como precisos, pero que se pueden manipular de acuerdo al contexto del evento.

Cada cierto periodo de tiempo, el sindicato (representante de la fuerza laboral, obreros) deben de conciliar los términos de un nuevo contrato colectivo de trabajo (CCT), con la fuente de empleo (empresa), en donde se llega a un acuerdo, con respecto a beneficios, incrementos salariales e índices productivos; de tal manera que la empresa sea viable, que genere riqueza suficiente, que sea redituable para los accionistas y que la competitividad sea atractiva para el mercado. Así podemos mencionar quizás el CCT mejor reestructurado como el de Telmex, han podido superar todas las concesiones y demandas laborales (ganadas como burócratas) en “beneficio de la empresa, y la superación de la fuente de empleo”.

Se había imaginado por algún momento, este pequeño detalle que ha debido de ser superado por el equipo de trabajo de Carlos Slim y del Diputado Plurinominal Francisco Hernández Juárez, como partes conciliadoras de este sindicato, amen que ahora Hernández Juárez ha transformado su coto de poder en la Unión Nacional de trabajadores (UNT) y su influencia ha trascendido ya que es miembro del Comité Ejecutivo Mundial y Vicepresidente del Comité Mundial de Telecomunicaciones.

Pero existe una mesa de dialogo, una parte que defiende al dueño de la empresa y otra que defiende al trabajador, como base una ley laboral vigente (independientemente que sea actual, viable, obsoleta e inequitativa) en la que se basa la negociación. Por lo tanto, se construye un acuerdo, se formalizan protocolos de mejora y metodologías para ahorrar y/o generar bienestar para todos los participantes.

Hasta aquí es un cuento de hadas, con ogros de color rojo y negro, con blof´s de cerrar la empresa y declararse en banca rota, pero a final de cuentas, Todos ganan y felices retornan a esforzarse aun más, generar más riqueza para los inversionistas y más beneficios para sus trabajadores.

Que sucede cuando la meza esta panda o incompleta, cuando el sindicato representa a los trabajadores, la ley laboral es la misma, pero quien defiende al patrón, también es un trabajador burócrata; Si me refiero a los sindicatos de las empresas paraestatales, sobre todo las empresas que no generan riqueza, que son un gasto para el erario publico, que son un beneficio que el gobierno otorga a la población; quien les pone un freno, quien construye los acuerdos que necesitan para que la empresa subsista y no se haga una masa de grasa y enredos que nadie podrá retener cuando esta explote.

Las negociaciones más exitosas, en antaño, han sido en épocas de elecciones, a cambio del voto de los sindicalizados, los sindicatos han podido llenar de peticiones absurdas e improductivas los CCT; volviéndolos caros, con gastos en pasivos impagables y estrangulando el presupuesto otorgado año con año.

Por un lado, el trabajador aporta sus cuotas sindicales en base a un porcentaje de su salario integrado, por otra la empresa otorga salarios completos a quienes estén en comisiones o administrando el sindicato; la realidad es que los dirigentes cada día se vuelven mas avaros, poderosos y compran mayor influencia; sin importar si las empresas a las que deben de servir aun generan su función para la que fueron creadas. Mexicana, IMSS, Pemex, CFE, SEP, y un largo Etcétera, son claros ejemplos de que la clase política continua apoderándose de México, el pueblo solo viendo como el erario se disuelve sin saber por donde iniciar el cambio. Sin entender que la conciliación debe de beneficiar a todos sus participantes, no solo a una clase social, es tiempo de dejar la demagogia, de entender el engranaje social y ser parte de la transformación de este nuevo México en el que cada persona sienta el orgullo de percibir un salario bien desquitado, que la envestidura que se ostenta obtenga el premio salarial acorde a su responsabilidad y desempeño. Por favor, basta de negociar con el dinero del pueblo, en su contra; México lo necesita para preservar tu empleo y para dejar de producir pobreza.

A mi mis timbres....

• Para que no se pueda abusar del poder, es preciso que el poder detenga al poder. Montesquieu (Escritor francés)
• Si el hombre fracasa en conciliar la justicia y la libertad, fracasa en todo. Albert Camus (Escritor francés)
• No se debe juzgar a un hombre por sus cualidades, sino por el uso que hace de ellas. François de la Rochefoucauld (Escritor francés)

 
Cyber Note: http://www.elfinanciero.com.mx/index.php?option=com_k2&view=item&id=7435&Itemid=26 Si se puede!!! Un estudiante de preparatoria de la Universidad de Guadalajara, gana premio que otorga la universidad de Kiev. En materia ambientalista y en proyectos, somos buenos, solo falta la ejecución. Animo!! Solo falta un poco, el querer hacer las cosas bien y a la primera, en hora buena a toda la UDG.