Imagine por un momento que la península de Baja California emita un comunicado en donde desea separarse de la republica mexicana, acto seguido, Estados Unidos reconoce el nuevo gobierno y desplaza tropas para que se ejercite la legalidad de la nueva “Republica de California”. Obviamente los intereses y estrategia conforman un problema, no solo local, también hemisférico.
Hablando de Ucrania y Rusia, el problema se agudiza
debido a las fuerzas y economías presentes en la región. Por un lado, la Organización
del Tratado del Atlántico Norte (OTAN o NATO en inglés), la Unión Europea (UE),
Inglaterra y China, como socio comercial de Rusia, que podría ver mermados sus
intereses comerciales, al ver a Rusia presionado por occidente.
Haciendo un poco de historia, la extinta Unión de Repúblicas
Socialistas Soviéticas (U.R.S.S.) fue gestada tras la Revolución de febrero de
1917, que provocó la caída del Imperio ruso, aglutinando en un régimen socialista
los pueblos dominados por el Zar Ruso. La amalgama resultante de tantos pueblos
no solo con historia, cultura e idioma diferente (Azerí, Turcomano, Uzbeko, Lituano,
Armenio, Estonio, Kirguís, Moldavo, Bielorruso, Ucraniano, Kazajo, Tayiko, Georgiano
y Letón; por mencionar algunos) bajo el yugo centralizado del gobierno
socialista, generó sociedades completamente divididas. Estas divisiones se
oficializaron en la perestroika (Reestructuración en ruso) que disolvió la URSS
en 1991 dando paso a las 15 republicas independientes, que a su vez tienen
regiones y etnias en cada república, pero de cierto modo son representados en el
parlamento.
Desde entonces a la fecha los gobiernos de estos estados
han desarrollado autonomía y creado infraestructura para sus pobladores, pero
algunas como Ucrania que tienen grandes asentamientos tribales locales, que por
su tamaño no subsistirían como nación o república, pero que al amparo de un
gobierno federativo han logrado tener progreso y bienestar, quizás baja representación
en el gobierno federado o alta injerencia de Rusia al interior de los pueblos,
ha logrado empoderar a los representantes de estas comunas, acrecentando la
inconformidad y promoviendo la ruptura con la república.
Putin ya había gestado el mismo entorno con Crimea, a
pesar de los intentos de las nuevas autoridades ucranianas y la presión de
Occidente, en un corto tiempo de organización celebraron el 16 de marzo de 2014
el referéndum sobre el estatuto de Crimea sobre su posible independencia de Ucrania
y el ingreso a la Federación Rusa, apenas 800 mil pobladores, formándose así la
República de Crimea y la ciudad federal de Sebastopol. Estratégicamente Crimea
es una península sobre el mar negro y domina un par de estrechos de acceso
hacia las repúblicas rusas.
La nueva versión implica los estados de Donetsk (la población
46% rusos / 45% ucranios, minas de carbón y fundiciones) y Luhansk (la población
49% rusos / 47% ucranios, minas de carbón), aproximadamente 2 millones de
personas, al igual que sucedió en Crimea, Ucrania esperaba un referéndum que
permitiera una salida pacifica al conflicto, sin embargo Vladimir Putin no pensó
bajo la misma óptica, ya que por la división de población es un empate técnico
y “no permitiría ver sufrir a los camaradas rusos bajo el yugo de Kiev”. Por
ello invadió Ucrania con un despliegue rápido de la armada rusa.
En junio de 2016 Ucrania firmó un acuerdo de libre
comercio con la Unión Europea lo que le ha permitido un desarrollo de su economía
y comercialización de sus cereales, electricidad y minerales. Adicional se ha
propuesto su adhesión a la OTAN, para brindar soporte ante las iniciativas invasivas
rusas. El conflicto apenas inicia, se dibuja más una posición estratégica en la
región del mar negro, que una política de rusa.
Intrínsecamente hay varios componentes adicionales, la
generación nuclear de electricidad, las minas de carbón y el gas que existen en
Ucrania y que se han restringido para Rusia por temas hemisféricos. Las
reacciones de los países miembros de la OTAN han sido inmediatos y las tropas
rusas están preparadas para la envestida de la OTAN, pero Putin está decidido a
apoyar la creación de las nuevas republicas y aceptar la adhesión bajo su
dominio, Ucrania vería mermada su economía y la mutilación por segunda ocasión de
su territorio y su patrimonio, tradicionalmente son pueblos que han sufrido los
estragos de la guerra y saben como resistir, pero nunca desistir en su encomienda,
aunque en ello les cueste la vida. Esto apenas inicia y el petróleo ya está por
encima de los 105 usd por barril.
A mí, mis timbres….
La ambición jamás se detiene, ni siquiera en la cima
de la grandeza. Napoleón Bonaparte (Emperador francés).
De nada sirve al hombre ganar la Luna si ha de perder
la Tierra. François Mauriac (Escritor francés).
El esclavo comienza por reclamar justicia y termina
deseando la realeza. Albert Camus (Escritor francés).
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